lunes, 14 de junio de 2010

Hablemos de Chiloé - I



Chiloé es un archipiélago situado en la patagonia chilena, al sur del sur del mundo. Tan al sur, que ni siquiera para los chilenos es tomada en cuenta. Su capital es la ciudad de Castro ubicada en la isla más grande del archipiélago, llamada Isla Grande de Chiloé. Es difícil determinar el número exacto de islas que conforman la provincia, de hecho, según las creencias de la zona, las hay que aparecen y desaparecen a su antojo. Pero lo que sí que resulta fácil de determinar es el nivel de abandono al que están sometidas en su totalidad.
Si bien es cierto que todo el archipiélago está apartado de las políticas centrales del estado, al que en Chiloé se refieren como "Chile", ya que los "antiguos" aún no se reconocen como chilenos, la Isla Grande está claramente mejor tratada que el resto de islas que lo conforman.
Y eso que la mayoría de servicios básicos dan risa, si no pena, porque el mero hecho de operarte un juanete, o aliviarte una almorrana, le obliga a uno ejercer de santo Job y tirar de paciencia, a falta de dinamita o trinitrotolueno.
Un accidente de coche ocurrido en el norte de la isla, en el que un capullo cualquiera choca contra un poste de luz, deja sin luz a toda la isla, por ende, a todo el archipiélago.
En las islas más pequeñas, o en alguna, ni siquiera hay tendido eléctrico, y no hablar de salud. Las postas rurales, que es como se llamaría a los consultorios locales, son locales de dos por dos, vacíos, que sirven como dormitorio improvisado de alimañas y algún paramédico perdido que otro. A este mismo respecto, la gente se tiene que solucionar sus problemas de salud, con conocimientos ancestrales heredados, pero que no son reconocidos por el sistema médico occidental, de hecho son prohibidas, hoy se le dice mal vistas o no exentas de algún peligro, pero en el pasado fueron perseguidas y "quemadas en la hoguera" las personas que las practicaban, y, obviamente, desde el sistema nacional de salud, se recomienda que no se usen éstas y opten por la "biomedicina" (medicina occidental).

Ahora yo me pregunto, señores listos y entendidos del mundo burbujoso que es el Palacio de la Moneda: ¿Cómo cojones esperan que un tipo de una de las pequeñas islas de Chiloé, a tropecientos mil años luz de usted y su medicina de mierda, con una visita semanal, con suerte, de un técnico paramédico, sin menospreciar, va a confiar en su sistema de salud, prohibitivo, clasista, despersonalizado y elitista?
¿En serio piensan ustedes, necios, que con una pastillita de "esas" van a arreglar las enfermedades, por otro lado diferentes y desconocidas en Europa, de esta gente que tiene miedo de tomar los remedios que saben, de buena fé, que les va a solucionar el problema de una?
¿USTEDES SON GILIPOLLAS O ES QUE AÚN NO SE HAN SACADO EL DEDO DEL CULO?

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